Adoro las plantas y pensé que había heredado de mi madre la mano verde
para cuidarlas. Así fue en el jardín de mi anterior vivienda: la atención que
les proporcionaba las hacía lucir hermosas y saludables.
Lo que no sabía entonces es que las plantas de interior iban a suponer un
difícil reto para mí, que en el exterior las plantas se cuidan prácticamente
solas porque es su hábitat natural pero en interior hay que tener en cuenta
factores como temperatura, luz, tipo de maceta, drenaje, aireación...
difícil reto para mí, que en el exterior las plantas se cuidan prácticamente
solas porque es su hábitat natural pero en interior hay que tener en cuenta
factores como temperatura, luz, tipo de maceta, drenaje, aireación...
Las casas están adaptadas a la vida de los humanos lo que no siempre es
acorde a las necesidades de nuestras amigas verdes.
El verano del año pasado perdí prácticamente todas mis plantas de interior
somo consecuencia de la ola de calor. Intenté compensar las altas temperaturas
con riegos más frecuentes y lo único que conseguí es que se pudrieran las
raíces.
Compré nuevas plantas. Una hermosa Monstera Deliciosa pues perdí el
ejemplar que había conseguido hacer enraizar a partir de un esqueje que
saqué de la gran planta de mi madre (podéis verlo aquí)
ejemplar que había conseguido hacer enraizar a partir de un esqueje que
saqué de la gran planta de mi madre (podéis verlo aquí)
Una Alocasia Polly con sus originales hojas alargadas de preciosas nervaduras plateadas.
Un helecho azul (Phlebodium aureum), alguna suculenta y cactus,
especialmente una Euphorbia ingens o árbol candelabro que llevaba
deseando hacía mucho tiempo.
deseando hacía mucho tiempo.
Estuve preocupada pensando cómo sobrevivirían a este verano. Íbamos a
estar fuera más de tres semanas y mi duda era si simplemente las regaba a
conciencia o dejaba algunos ejemplares como la Monstera y el Helecho sobre
un balde con algo de agua. Y eso fue lo que finalmente hice. Por su parte
regué cactus y suculentas sólo con un poquito más de agua de lo normal.
estar fuera más de tres semanas y mi duda era si simplemente las regaba a
conciencia o dejaba algunos ejemplares como la Monstera y el Helecho sobre
un balde con algo de agua. Y eso fue lo que finalmente hice. Por su parte
regué cactus y suculentas sólo con un poquito más de agua de lo normal.
A mi vuelta de vacaciones el aspecto de mi pequeña jungla urbana era el de
estas fotografías, parecía que no había habido demasiados estragos aunque
el helecho había perdido vitalidad y bastantes hojas y las suculentas tampoco
mostraban buen aspecto.
estas fotografías, parecía que no había habido demasiados estragos aunque
el helecho había perdido vitalidad y bastantes hojas y las suculentas tampoco
mostraban buen aspecto.
La prueba veraniega parecía superada pero no, tras el primer riego de vuelta
de vacaciones, en el que reconozco fui algo generosa, suculentas y helecho
empeoraron y los perdí. Lo que no esperaba es que un mes después mi
Candelabra tree empezase a dar muestras de tener las raíces podridas.
de vacaciones, en el que reconozco fui algo generosa, suculentas y helecho
empeoraron y los perdí. Lo que no esperaba es que un mes después mi
Candelabra tree empezase a dar muestras de tener las raíces podridas.
No lo entendía, apenas lo había regado y lo achaqué a que la maceta en la
que venía era de plástico y, además, estaba metida en una cesta por lo que
las raíces apenas se aireaban.
Busqué consejos por la red para intentar salvar mi Eurphorbia ingens: corté
por lo sano, espolvoreé la zona de corte con canela para evitar infecciones y
dejé secar la cicatriz una semana antes de plantarlo en un tiesto de barro con
una buena base de piedra volcánica para facilitar el drenaje y evitar que las
que venía era de plástico y, además, estaba metida en una cesta por lo que
las raíces apenas se aireaban.
Busqué consejos por la red para intentar salvar mi Eurphorbia ingens: corté
por lo sano, espolvoreé la zona de corte con canela para evitar infecciones y
dejé secar la cicatriz una semana antes de plantarlo en un tiesto de barro con
una buena base de piedra volcánica para facilitar el drenaje y evitar que las
raíces volvieran a pudrirse.
En la fotografía que sigue lo podéis ver tras la operación salvamento.
Ahora sólo tocaba esperar a que enraizara y saliera adelante. Prometí además
que sólo lo regaría con cuentagotas y pulverizando el tiesto (literalmente) Pero
nada, mi Ives (así lo habíamos llamado) también murió. Me disgusté mucho y
me propuse aprender de la experiencia: cactus, crasas y suculentas siempre,
siempre en tiestos de barro y regadas sólo con cuentagotas y algún baño
pulverizado cada tanto.
que sólo lo regaría con cuentagotas y pulverizando el tiesto (literalmente) Pero
nada, mi Ives (así lo habíamos llamado) también murió. Me disgusté mucho y
me propuse aprender de la experiencia: cactus, crasas y suculentas siempre,
siempre en tiestos de barro y regadas sólo con cuentagotas y algún baño
pulverizado cada tanto.
Pero, a cambio, llegaron nuevos habitantes verdes a casa: un maravilloso
ejemplar de Anthurium Andreanum en la variedad Prince of Orange que
compré y que me surte de flor cortada porque no para de echar flores.
Parece que está encantado con la luz y riegos que recibe (no lo quiero
decir muy alto)
ejemplar de Anthurium Andreanum en la variedad Prince of Orange que
compré y que me surte de flor cortada porque no para de echar flores.
Parece que está encantado con la luz y riegos que recibe (no lo quiero
decir muy alto)
Y dos esquejes que se han desarrollado espectacularmente en muy poco tiempo.
Una oreja de elefante (Alocasia odora) que me regaló mi amiga Belén
resultado de aligerar de ramas su precioso ejemplar. Una semana en agua y
podéis ver en la imagen siguiente las primeras raíces.
Y un Singonio (Syngonium podephyllum) del que cogí una ramita de una
maceta de la biblioteca en la que trabajo, metí en agua y también en pocos
días empezó a echar raíces.
Así lucen ahora, apenas dos meses después de pasarlos a tierra.
El único ejemplar que ha sobrevivido en casa durante años y que procede
del jardín de mi madre, es el cactus de la siguiente fotografía (desconozco su
nombre). Ya puedo echarle más o menos agua, cambiarle a un rincón más o
menos ventilado o iluminado, que éste aguanta veranos, inviernos... y yo creo
que es porque lo cuidó mi madre desde pequeño y lleva su mano verde ;-)
del jardín de mi madre, es el cactus de la siguiente fotografía (desconozco su
nombre). Ya puedo echarle más o menos agua, cambiarle a un rincón más o
menos ventilado o iluminado, que éste aguanta veranos, inviernos... y yo creo
que es porque lo cuidó mi madre desde pequeño y lleva su mano verde ;-)
En la última visita a mi madre nos volvimos a acercar a un magnífico vivero de
Ciudad Real, Viveros Tian.
Ciudad Real, Viveros Tian.
Si me seguís en Instagram habéis podido comprobar que hemos convertido en
costumbre pasar allí al menos una mañana porque es grandioso, tiene miles de
variedades y aprovechamos para compartir nuestra pasión común por el mundo
verde.
Además está genial de precio por lo que siempre nos traemos algún ejemplar.
Esta última vez yo adquirí algunas crasas y cactus. Mantengo mi promesa de
regar con cuentagotas o baño pulverizado.
Esta última vez yo adquirí algunas crasas y cactus. Mantengo mi promesa de
regar con cuentagotas o baño pulverizado.
Y por supuesto trasplantar a barro.
Compré algunos tiestos en el propio vivero y también me hice con otros muy
originales de Casa shops, como el que lleva patitas en la fotografía de abajo o
las pequeñas macetitas de terrazo que en realidad son de fibra de bambú pero
tienen un aspecto auténtico. Además las cuatro no llegaban a 5€, de esas
compras con las que acabas super encantada.
He disfrutado compartiendo con vosotros los pequeños retrocesos y avances
de mi pequeña jungla urbana.
de mi pequeña jungla urbana.
Admito consejos ¡Tengo tanto por mejorar y aprender sobre plantas de interior!!!
Mi madre tiene mucha mano verde y su patio da gloria verlo pero yo en vez de su mano por las plantas he heredado solo su miopía 😂
ResponderEliminarEso sí, cactus y suculentas son las reinas de casa.
Me ha encantado tu rinconcito verde: resulta muy acogedor y al mismo tiempo estéticamente impecable.
Besitos y feliz finde.
Pues a mí son las que peor se me dan Isabel, yo creo que porque me excedo en los riegos aunque voy aprendiendo a moderarme ;-)
EliminarMe alegro que te guste mi pequeño espacio verde <3
Besazos y feliz fin de semana
¡Buenos días! Nosotras nos pasamos todo el año, prácticamente, intentado arreglar los destrozos del mes de agosto en nuestras plantas; no tenemos más remedio que delegar los cuidados y, por muchas instrucciones que demos, siempre hay bajas y retrocesos en su desarrollo... Lo que si tenemos claro es que el barro es lo mejor y dejar que escurra todo el agua del riego sin que se acumule en el platillo o porta macetas... Aun así, hay plantas que se nos resisten, como la cosilla de adán; imposible criarlas dentro de casa, y lo hemos intentado todo... Nos encanta tu rincón, tan llenos de vida y acogedor, y nos sentimos muy identificadas con tu pasión por criar las plantas desde el principio, poniendo los tallos en agua para trasplantarlos después. Es una satisfacción enorme criarlas desde pequeñitas, ¿verdad?
ResponderEliminarUn beso grande de las dos y feliz fin de semana
J&Y
Exacto chicas, como decimos mi madre y yo es como un reto, no se trata sólo de comprarlas y disfrutarlas, lo genial es conseguir una pequeña parte de otra planta y hacer que se desarrolle y salga adelante, como decís "criarlas desde pequeñitas"
EliminarPoco a poco las vamos entendiendo y sacando adelante ;-)
Os deseo un precioso fin de semana <3 <3
Piola, me ha encantado tu post; mostrando las cosas como son, lo bueno y lo que no sale como quisiéramos, algo que no es usual en las redes. Yo también delego (y agradecidísima por poderlo hacer) el cuidado de mis macetas las dos semanas que me voy. Esta año cuando volví, la drácena tenía tres setitas haciéndole compañía ¡nacidas en pleno agosto sevillano!
ResponderEliminarSiento no poder aportar consejos, suelo tener los mismos problemas de cactus que se mueren. Así mismo, comparto la pasión de los esquejes, también me encanta germinar raíces: ahora tengo un pequeñísimo limoncito de unas semillas de este verano; hace años planté otro con ese mismo sistema y llegó a tener un metro de altura: me lo cargué en una poda demasiado exhaustiva...
¡En fin! Unas veces cal, otras arena...
¡Muchos besos! Siempre me encantan tus textos y tus fotos.
Beatriz Fernández
¡Qué bueno saber de ti Beatriz!!!
EliminarComo dices una de cal y otra de arena o aprendizaje acierto/error ;-)
Quiero pensar que también con las plantas la experiencia es un grado, que no todo es nacer con mano verde así que tenemos solución como mata cactus.
Impresionante lo del limonero a partir de semillas, esta vez la poda mínima, ya sabes.
Besazos y gracias por compartir por aquí tu experiencia <3
Yo también he disfrutado mucho leyéndote y siguiendo el proceso de tu jungla urbana, querida Piola!!
ResponderEliminarAquí soy de muy poca ayuda, pues tampoco yo tengo mano verde, cuántas plantitas no habré perdido ya....Y eso mirando y remirando información acerca de cada plantita que compro, por ver el riego, la exposición, el lugar, por si le da aire y ella no lo quiere....En fin, que les hago toditos los mimos y ellas luego deciden si si, o si no, jajaja......De todos modos, siempre guardo la esperanza de aprender y que mis plantas queden en casa como reinas por mucho tiempo!!
Tu jungla urbana está renaciendo, me encantan cada una de las macetas, cestas y demás!
Un besote grandee Piola, feliz semanita!
Parece que somos muchas las que acabamos perdiendo nuestras plantas por exceso de mimo, Menchu, yo también me informo por la red sobre consejos para cada tipo pero luego imagino que las condiciones de cada casa son distintas y no es fácil acertar, además en mi caso tiendo a regarlas en exceso por miedo a perderlas y lo que hago es "enguachinarlas" como decimos por mi tierra.
EliminarPasito a pasito espero que aprendamos a entenderlas y conservarlas ;-)
Besos y feliz comienzo de semana <3
En el interior todo se complica bastante, yo sigo con mi filosofía de no agobiarlas, las riego poco, excepto a las fitonias que ellas mismas te lo piden poniéndose tristes y mimosas. Al Anthurium no lo riegues mucho, no lo necesita.
ResponderEliminarYo hace poco fui a un vivero muy preocupada por una planta que me había llevado de casa de mi suegra, se le caían las hojas a puñados, el especialista me dijo haz con ella la teoría del abandono, ahora mismo esta estresada por el cambio, sácala fuera en a un rincón de semisombra y no la riegues ni la abones, efectivamente ahora esta preciosa y paro su estrés.
Así que arriba la teoría del abandono!
Bss
Ese ha sido siempre mi problema y al que quiero ponerle remedio, Nika, estoy demasiado pendiente de ellas y últimamente intento no hacerles mucho caso para no agobiarlas, lo que el jardinero llama la teoría del abandono ;-)
EliminarNunca hubiera imaginado que las plantas tuvieran estrés pero, claro, son seres vivos y es lógico que se vean afectadas por los cambios, más incluso que los otros seres vivos puesto que ellas en principio no deberían cambiar de ambiente pues su medio natural es estático.
Tus plantas siempre lucen preciosas y tus consejos son muy valorados ¡Gracias!!!
Tengas o no mano verde, los meses de calor hacen estragos en nuestras plantas. Yo he matado montones y montones de ellas, pero como tú sigo dándoles todos mis mimos y cuidados... unas veces con más éxito que otras.
ResponderEliminarEn cualquier caso, da gusto ver cada rincón de tu casa y las preciosas composiciones con las que siempre nos deleitas. Tienes un gusto absolutamente exquisito para combinar elementos y hacerlos brillar.
Un beso grande, Piola.
Observo que no soy la única y eso me hace sentirme mejor porque cuando pierdo alguna me siento fatal. Poquito a poquito iremos mejorando Isabel ;-)
EliminarSiempre un placer recibirte y agradecerte tus motivadores comentarios <3
Prefiero no dar consejos porque últimamente yo también he perdido algo de mi habilidad con las plantas. En mi jardín de Salamanca las plantas brotaban sin más año tras año pero aquí en la playa he perdido a muchos ejemplares tanto de interior como de exterior. Y eso que por el clima deberían crecer sin muchos cuidados. A veces he llegado a pensar que es por culpa de los viveros porque las plantas crecidas de esquejes cogidos por la calle son mucho más resistentes y les hago el mismo caso. Ahora por Navidad me he regalado un Anthurium rojo, una Poinsetia y un cactus con flores. Espero que duren. En Navidad nos vamos una semana a mi país y todavía no se qué hacer con ellas. Si dejarlas en la bañera o bajarlas a la piscina y decirle al conserje si me las riega. Las plantas son como las mascotas, no se las puede dejar solas y necesitan de mucho cariño. Te mando un fuerte abrazo.
ResponderEliminarHola María! A mí también se me ha pasado por la cabeza lo de los viveros y tiendas de plantas porque hay algunas variedades que he comprado en más de una ocasión y es llegar a mi casa y empezar el declive, he probado a regarlas y a no regarlas, a trasplantarlas o no pero la evolución ha sido siempre la misma hasta acabar decidiendo que no me volveré a hacer con una de esa variedad.
EliminarSi vas a estar mucho tiempo fuera en Navidad, la opción de bajarlas y que te las riegue la conserje es genial. Desde ya te deseo unas felices navidades para ti, los tuyos y tus plantas ;-)
Besazos <3
Contar con jardines verticales en casa es ideal para los amantes de las plantas, ya que permite disfrutar de la belleza y frescura de la vegetación sin ocupar mucho espacio. Además, añaden un toque verde y vibrante a cualquier habitación, mejorando la calidad del aire y creando un ambiente acogedor.
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