No era éste el post que tenía programado para hoy, pero al enterarme de
los brutales acontecimientos que vivió la ciudad de París este fin de semana
recordé una de las fotografías que tomé en mi viaje a la capital francesa en
febrero de este año: la fachada del ayuntamiento, l'Hôtel de Ville, mostraba
una gran pancarta con la frase que unió a parisinos y al mundo entero como
repulsa contra el terrorismo a raíz del atentado que tuvo lugar un mes antes
en el semanario Charlie Hebdo: Nous sommes Charlie.
Y a su lado las tres máximas de la Revolución Francesa:
Liberté, Egalité y Fraternité.
Tres máximas que no parecen ser entendidas por quienes utilizan la
violencia para imponer sus ideas, por quienes se empeñan en que la
humanidad retroceda a tiempos medievales, por quienes pretenden
que los logros y libertades conseguidos para el bien general se
tambaleen ante la sinrazón
La magnífica Ciudad de las Luces, la Ciudad del Amor, de la Concordia,
ha vivido unos días oscuros y tristes pero nada apagará su brillo ni el
deseo de visitarla o volver a descubrirla.
De visitar sus monumentos, quedar fascinados por sus gárgolas,
enamorados de sus puentes...
Disfrutar de un recorrido por el Sena admirando la magnífica arquitectura
que bordea sus riberas...
que bordea sus riberas...
Hasta llegar a ella, la emblemática Torre Eiffel.
Pasear por su Rive Gauche, descubriendo el Barrio Latino...
Y pasar a la margen derecha del Sena para maravillarse con el
Palacio de Justicia...
Disfrutar del Mercado de las Flores...
Y dirigirse a Le Marais hasta la Plaza de la Bastilla...
París cosmopolita y multicultural, llena de contrastes...
De tejados cuyas ventanas empiezan a iluminarse al anochecer y nos
encandilan como estrellas.
Nous sommes Paris.
Nosotros somos Madrid, Nueva York... somos el Pueblo Sirio dispersado.
Nosotros somos ciudadanos de un mundo que quiere La Paz.
Nosotros somos Madrid, Nueva York... somos el Pueblo Sirio dispersado.
Nosotros somos ciudadanos de un mundo que quiere La Paz.
Buenos días Piola,buen paseo que me has dado,ir a París es uno de mis sueños de siempre,mientras me quedo con tu exposición. Gracias, súper abrazo de lunes triste . E
ResponderEliminarUn sueño que seguro cumples, Elena, yo tardé en cumplirlo pero mereció la pena, eso sí procura que sea en primavera bien entrada porque rasca pasamos una barbaridad y la lluvia no nos dio tregua ^-^
EliminarBesazos
Nadie conseguirá apagar la Ciudad de la Luz. Besos.
ResponderEliminarNinguna ciudad debería verse inmersa en lo que París se vio el sábado. Es una locura y una barbaridad. Tengo la suerte de conocer esa maravillosa ciudad y estoy muerta de rabia. Que paren ya por favor.
ResponderEliminarOui PIola Nous, nous sommes París.
Besitos.
María
Un lindo homenaje a esta hermosa ciudad que ahora vive momentos tan desoladores!!
ResponderEliminarNo dejaremos que se apague la luz de la paz en el mundo entero!!
Gracias Piola, un beso grande,
Menchu
Nadie podría haber soñado un post tan triste pero son los tiempos de locura en los que estamos sumergidos.
ResponderEliminarEs así Piola... somos muchos, en muchos lados, los que sólo queremos vivir en un mundo en Paz.
ResponderEliminarEs hermoso tu recorrido, un recorrido que se torna más melancólico por estos días. Pero estoy segura que Paris va a seguir siendo la Ciudad Luz, y nos seguira maravillando y seguiremos soñando con ella. Un beso!
Nuestro mundo está enfermo y loco, Píola. Entre todos hemos construido un mundo en el que la violencia está demasiado presente. Por otro lado unos dementes han decidido coger una confesión como el Islam para escudarse en las mayores atrocidades que podamos imaginar y por otro todas las organizaciones gubernamentales son incapaces de frenar todo esto y ponerle remedio. Normalmente soy de naturaleza optimista pero en este tema me dejo llevar por la desazón porque no le veo un buen final. Ojalá el mundo recupere algún día la razón y podamos vivir en paz y sin miedo disfrutando de las cosas bellas de la vida… que son MUCHAS. Besos
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