Agua aromatizada con frutas

Con esta ola de calor apenas si me apetece comer, lo único que quiero

es beber, beber, beber.

Para las comidas una refrescante sopa fría como gazpacho o alioli (la receta

de ambos ya la compartí con vosotros el año pasado, aquí)

O uno de esos smoothies de verduras y frutas tan de moda ahora entre
las celebridades, que yo hago a mi manera y tengo pendiente compartir con
vosotros.

Entre horas, tomar una bebida refrescante sin gas, que no hinche ni genere

más sed por culpa de edulcorantes.

Una bebida natural que ademas de hidratarnos y refrescarnos sea saludable,
aportando a nuestro organismo vitaminas y otros componentes esenciales.

Hablo de las aguas aromatizadas con frutas, de plena tendencia aunque en
realidad se trata de variantes más o menos concentradas de los
tradicionales zumos y limonadas.

Lo ideal es hacerlas con frutas de temporada como las cerezas, el melocotón, la

sandía o el melón en verano o los frutos rojos a finales del verano y durante el

otoño.

Y, por supuesto los cítricos, tan refrescantes y de alto contenido en Vitamina C:

pomelo, lima, limón y naranja.

Me encantan las frambuesas y suelo tenerlas siempre congeladas para

elaborar postres o combinar con yogures, mueslis o porridges.

Al dejarlas en agua se deshacen fácilmente dándole a ésta color y sabor.

Su combinación con el pomelo aporta al agua un toque amargo muy saciante.

La cereza es una de mis frutas preferidas, puedo estar picando todo el

día si las tengo delante.

Deshuesadas aportan al agua un rico sabor y adoro cuando me llega

algún trocito que masticar.

Los melocotones son muy aromáticos: ya cuando los estamos mondando y

partiendo emanan un aroma irresistible.

El kiwi amarillo, de vuelta en verano, con su suave sabor dulce también

aportará un toque riquísimo en las aguas aromatizadas.

Si queremos una bebida más intensa, podemos exprimir alguno de los cítricos

para echárselo al agua, consiguiendo así una especie de limonada de frutas.

Una vez troceadas las frutas las echaremos en una jarra con hielo y agua.

Si queremos el agua aromatizada algo más dulce, podemos utilizar jarabe de

arce o sirope de agave que endulzan de una manera más suave y saludable.

Así conseguimos una bebida sana y refrescante para combatir el calor y

llenarnos de energía.

Seguro que si la pantalla lo permitiese, alargaríais el brazo y tomaríais uno

de estos refrescantes vasos.

¡Os aseguro que yo también!

Con este post participo en la nueva edición de Hoy Compartimos... dedicada al tiempo de verano.

Ese summer time que tanto nos gusta.