lunes, 4 de agosto de 2014

Casitas victorianas y un precioso Bed and Breakfast






Siempre me han encantado las casas de estilo victoriano, son
como casitas de cuento o de muñecas en tamaño natural.

La primera vez que viajé a Estados Unidos recuerdo que mi mayor
ilusión era descubrir estas construcciones de encanto especial.

Creo que por eso en aquel momento me decepcionaron tanto Nueva York
Las Vegas, demasiado cosmopolita y "europea" la primera y con ese
punto "hortera" característico la segunda.

Actualmente mis gustos no es que hayan cambiado, pero sí
se han vuelto más amplios y sofisticados.

Me encantaría volver y redescubrir NY, con sus típicos apartamentos y sus
lofts bohemios, de base clásica o vintage industrial y su decoración ecléctica.





Pero entonces (hace dieciocho años) no fue hasta llegar a San Francisco
que empecé a disfrutar realmente de aquel viaje.

Llevábamos una cámara analógica y he desempolvado varias
fotografías que he escaneado para mostraros algunas de estas
clásicas casas americanas.

Por supuesto tomamos fotografías de las famosas "viejas damas" de
la ciudad San Francisco, que pude disfrutar desde fuera. Pero lo que
realmente me encantó fue visitar por dentro algunas casas de la zona
vinícola al norte de la ciudad, los valles de Napa y Sonoma, llena de
pueblecitos encantadores y lindas bodegas.

La casita amarilla de las fotografías y su interior fue el hogar de
Mariano Vallejo, general mejicano a quien USA debe la independencia
de California primero y su anexión a Estados Unidos poco después.

La han mantenido como una casa-museo con los muebles y la decoración
de la época (principios del XIX) e incluso los vestidos y la ropa de hogar
característica del momento.

(Ah!, en la fotografía de arriba me veis recolectando semillas y
esquejes, lo que me valió más de una regañina por parte de mi pareja
pero es algo que hago frecuentemente y que debo haber heredado
de mi madre a la que he visto hacerlo en casi todos los viajes)




En Sonoma nos hospedamos en un precioso Bed and Breakfast
del que también he rescatado algunas imágenes.




Se llamaba The Cottage.

Sus dueños habían transformado un garaje en una pequeña suite con
cocina, comedor, vestidor, baño y una zona de estar con biblioteca. 

Nos contaron que eran unos enamorados de España y, en efecto,
descubrimos varios libros de fotografías de nuestro país.

La estructura de la construcción me pareció preciosa, con una gran
bóveda central y un tragaluz cenital.

La trasera del muro de la chimenea formaba un pasillo/vestidor
que daba acceso al baño y en el que una de las paredes se había cubierto
totalmente de espejo ampliando la sensación de espacio y luz.

Algunos muebles eran vintage, como la preciosa butaca o la alfombra,
y la idea de utilizar la vieja puerta de madera como cabecero me
pareció muy original.

El cottage tenia acceso privado desde la calle a través de un pequeño
jardín con el suelo cubierto de plantas de fresas que en aquel
momento estaban en su mejor momento. 

Los dueños llamaban cada mañana haciendo sonar una campana
situada en la cancela y al salir encontrábamos colgada una cesta con
bollería recién hecha envuelta en un paño de cuadros vichy.

La cocina contaba con una gran variedad de tés, cereales...
organizados en preciosos botes. Una pena no haber tomado fotografías de
estos maravillosos detalles, pero claro, entonces no imaginé que algún día
tendría un blog, de hecho ni siquiera estoy segura de que entonces
existieran.

Y el Cottage estaba cada día lleno de flores frescas...

Un sueño, ¿no os parece?

Un sueño, sobre todo entonces en el que, al menos yo, desconocía
conceptos como delicatessen o hotels with charm tan de
tendencia actualmente. 

Lo cierto es que convertimos este lugar en la base desde donde hicimos
escapadas por toda la zona del norte de San Francisco y, aunque luego
fuimos descubriendo otros hotelitos con encanto a lo largo de la carretera
de la costa de SF a LA, ninguno superó a The Cottage.

He de confesar que también tuvimos que hacer noche en otro lugares
nada recomendables: es el riesgo que tiene hacer viajes sin paradas
programadas, sobre la marcha, parando donde y cuando apetece.

A veces no resulta cómodo o divertido porque te ves a las tantas
de la noche intentando encontrar un lugar decente donde hospedarte
pero, con mucho, prefiero este tipo de viajes a los programados.

¿Y vosotros?


(Ah!, aunque no lo sabíamos aún, Javier nos acompañó en este
magnífico viaje o al menos en parte, porque yo volví embarazada.
Realmente fue un viaje encantador)









13 comentarios:

  1. Entonces fue un viaje más que especial ya que te enteraste que esrabas embarazada....
    A mi tb me enamoraron las casitas de SF.... Yo ya me dije si algún dia tengo que mudarme a EEUU,que sea en San Diego o ahi!
    En aquel entonces ya tenian gusto para decorar y ojo para el deralle!!! Gracias por compartirlo Piola!!
    Que tengas una buena semana! Besooo

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  2. Qué bonita historia Piola!! Me gustan mucho ese tipo de casas y espero algún día viajar a EEUU para poder disfrutar de mis descubrimientos, jeje!!
    Bsts

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  3. Ayyyy qué lindo Piola, y además, sabiendo ahora que ya estabas embarazada entonces, es una maravilla, qué recuerdos tan lindos tienes de ese viaje!!
    Ya Javier sin saberlo había viajado a USA, jejejeje......
    El Cottage es precioso, me encantan esos hotelitos pequeños, yo también visité uno en Niágara, un B&B, encantador y me has dado la idea para mostrarlo también, creo que tengo algunas fotos del interior....
    Gracias por compartir estos momentos tan bellos con nosotras, se te ve guapisíiisima en las fotos!!
    Besitosss y feliz semana!!

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  4. Que guapa Piola!!! Me ha encantado verte!! Y recolectando semillas y esquejes, yo tambien lo hago, no lo puedo evitar !! A mi me pasa como a ti, las casa victorianas las encuentro encantadoras, sus colores sus formas, son una preciosidad.
    El lugar en el que os alojasteis es divino, se nota que disfrutasteis muchisimo!!!
    Muchos besos!
    Nika

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  5. Qué interesante, me encantan estas casas, se antoja un lugar precioso, gratos recuerdos segurooo
    Bstos

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  6. Qué chulada de viaje! Tengo ganas desde hace tiempo de conocer la costa Oeste americana...y el hotelito es una preciosidad!

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  7. Me ha encantado la historia y me ha hecho gracia lo de que el niño os acompañó de alguna manera. Entonces, es un poquito americano, ¿no? :) San Francisco es de esos sitios a los que siempre he querido ir. Saludos desde la playa,
    Marta
    A Bilingual Baby

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  8. Tras leer tu narración,me has hecho replantearme la idea de viajar a yankilandia.. Y mira que ahora estoy mas cerca... Un bonito reportaje... Besazos guapa :)

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  9. Hola Piola yo estuve hace poco con todos mis niños recorriendo la costa oeste de EEUU y al igual que tu me enamore de ese estilo victoriano tan propio de las casitas de San Francisco con sus bellas colinas !!!!
    Lindas fotos

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  10. So cute!!!!
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    Have a lovely day doll!!!
    Expressyourself

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  11. Re linda historia :), me encanto y lindas fotos.

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  12. Piola me ha encantado ese relato de tu viaje a USA...creo que ese casita fue todo un hallazgo para aquella época en que eso nos pillaba un poco mas lejos...
    Seguro que hora mirarías con otros ojos Nueva York...yo me alojé en un apartamento en Mahantan que te hubiese encantado...
    me gustó mucho San Francisco...y las Vegas es lo que es, un parque temático para adultos...sin demasiado gusto...
    En el tema de alojamientos no me gusta improvisar...siempre llevo algo buscado para evitar sorpresas...
    Se te ve estupenda en esas fotos...y entiendo que ese viaje siga siendo especial, si allí concebiste a Javier...
    Un abrazo

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  13. Ohhh, romántico lo mires por donde lo mires, tú si que sabes. Me encantaría disfrutar de un viaje de este tipo, y sinceramente de cualquier tipo, últimamente demasiados planes entre manos como para incluir viajes, así que aquí, conformándome con los ajenos y disfrutándolos. Y tú tan pragmática, contando que dormiste en antros jajaja, es lo que tiene en ocasiones la improvisación, que no todo es color de rosa. Pero...lo que me ha sorprendido es que no te gustara Nueva York???, ole tú, rompiendo mitos, que todo el mundo está encantado con su viaje o loco por ir, y vienes tú y nos cuentas que te decepcionó, pues me parece fenomenal, ¡viva Piola! y su unicidad :)
    Un besazo fuerte y que pases un verano estupendo
    PD. El otro día se me fue al garete un comentario larguísimo, así que ahora me he "ensañado" con este, jeje.

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