Quizás

De mi gusto por las piezas de porcelana ya os habréis dado cuenta.

Me gusta coleccionar grandes platos sueltos que utilizo básicamente

como fuentes llanas.

Durante las vacaciones descubrí esta pieza 

con viva decoración en rojo y negro.

Había otros tonos y aunque suelo decantarme
por tonalidades más suaves,

finalmente me decidí por éste.

Me pregunto si tuvo algo que ver el hecho de que

mi hermana me acompañara, que fuera ella quien cogió

el plato y que quedase estupendo con el conjunto que

llevaba puesto.

Su camisola de lino, sencillamente bordada a punto de cruz,

quizás me hizo imaginar una rústica mesa de madera,

un mantel bordado sobre blanco lino,

el plato sobre la mesa y todos los míos alrededor

disfrutando de una agradable comida.